Movernos en el reino espiritual debería ser parte de la vida del creyente como lo es la oración, la adoración y la lectura de la Biblia. La sanidad, la liberación, las señales y las maravillas son una herencia para todos los seguidores de Jesucristo. Este libro le enseña cómo remover los velos de las limitaciones religiosas para redimir al perdido y transformar a las comunidades.